Y como todo en la vida no es trabajar, algún día salimos a la calle a disfrutar. En esta ocasión visitamos “El Parque del Retiro” en Madrid, sorprendiéndonos con cada rincón que nos ofrece. Fuentes, flores, animales y vistas preciosas, que acompañadas del buen tiempo nos hicieron pasar un día inolvidable. Además de pasear mucho, tuvimos tiempo de seguir una clase de gimnasia colectiva ¡No nos libramos de hacer ejercicio!. Eso sí, después de tanto desgaste repusimos fuerzas con una buenísima comida.
Volvimos a casa como siempre: cansadas, pero encantadas y con nuestra mejor sonrisa.