Este pasado domingo hemos celebrado en la Fundación Astier Centro San José, un emotivo acto para conmemorar la fiesta de Pentecostés. En su Solemnidad, el Espíritu Santo quiso ofrecernos sus dones: Sabiduría, Entendimiento, Consejo, Fortaleza, Ciencia, Piedad y Temor de Dios. “Sin duda Dios es Amor”. Cuánto nos quiere y nos ayuda a seguirlo a través del Espíritu Santo, derramando sus dones sobre nosotros para fortalecernos en nuestra vida y en la de los demás.
En la capilla de nuestro Centro pudimos compartir este GRAN REGALO, sintiéndonos muy agradecidos por tantas caricias de nuestro Señor y tomando como modelo a Nuestra Dulce Madre, mujer dócil que siempre supo decir Sí al Espíritu.
El amor de Dios no tiene límites, nos envió al Espíritu Santo para que sea nuestra fuerza y ayuda constante. Él estará siempre con nosotros para ayudarnos durante toda nuestra vida. ¡No estamos solos!