Con pena y alegría, hoy celebramos la jubilación de nuestra amiga PEPA, y queremos escribirle desde el corazón, unas palabras de agradecimiento por habernos acompañado en este camino.
Ha vivido la misión como si fuera suya, con unas capacidades tan extraordinarias que hace que su singularidad, la convierta en un trozo del alma de esta casa. Sí, así la sentimos, a otro nivel, del que nos hemos nutrido, qué gozada! Aplaudimos su compromiso, su esfuerzo y actitud.
Para acabar queremos decirle que no solo estamos agradecidos. También estamos muy orgullosos de ella y de que nuestra casa haya sido el entorno perfecto para aportarle felicidad.